Llevamos ya muchos días “a salvo” en casa, y los que nos quedan a la vista de los acontecimientos.
Cada uno tenemos una situación diferente: algunos estáis teletrabajando, otros tenéis que salir a trabajar porque tenéis trabajos esenciales y, de estos, algunos corréis mucho riesgo en vuestro trabajo, otros estamos en casa sin más porque nos ha afectado un ERTE o cualquier otra medida que haya tomado la empresa para sobrevivir a esta situación.
En medio de cada una de nuestras situaciones personales, tenemos que hacernos cargo de nuestros hijos, sean de la edad que sean.
Pero ¿Cómo hacernos cargo de ellos si no nos hacemos cargo de nosotros?
Esta idea surge con más fuerza ahora en esta situación tan atípica y desbordante que estamos viviendo, pero serviría para cualquier otro momento.
Ahora muchas emociones están a flor de piel: miedo, incertidumbre, inseguridad, tristeza…y también en nuestro día a día habitual nos abordan otras emociones a las que no prestamos mucha atención, por las prisas con las que vivimos, y que es necesario mirar para cuidarnos y poder llegar a nuestros hijos siendo un canal lo más limpio posible.
En estos días muchos artículos nos llaman a hacer consciencia de todas esas emociones para cuidar nuestra salud mental y emocional en esta situación que estamos viviendo.
Pero ¿Cómo se hace eso si no tienes hábito?
Como todo, hay que tener una mínima práctica, alguna idea de por donde empezar a “ser conscientes de nosotros” y qué hacer para cuidarnos.
Hay muchos artículos y vídeos de profesionales que corren por redes estos días para daros ideas, yo os voy a decir algunas cosas que me han servido a mí, sencillas, fáciles, pero hay que ser constante, cogerlo como un hábito, y tomar consciencia de lo importante que es mirarnos a nosotros mismos, cuidarnos para estar bien y así, estar mejor para los demás, principalmente para poder atender emocionalmente a nuestros hijos que es lo que más necesitan.
Mis pequeñas “ideas de consciencia”:
- Cuando te duches, un momento en el que estáis solos, hazlo sintiendo el agua, el jabón, el olor de ese jabón, la sensación del agua en tu piel…que ese sea un momento de “sentirte”. Verás que sensación más buena.
- La misma actitud de la ducha, la puedes repetir cuando te laves las manos (que ahora hay que hacerlo muy a menudo): el agua, el jabón, el olor, la temperatura…
- Las comidas es posible que las hagas en familia, con los peques, y te sea más difícil “aislarte” pero si en otro momento, tienes oportunidad de tomarte un café, una infusión, una cerveza, una toma de chocolate, un puñado de frutos secos…intenta hacerlo a solas, si ya te asomas a la ventana, al balcón (lo que tengas) y eres consciente de saborearlo, con calma…el momento te va a traer mucha tranquilidad.
- Dedica algún rato (con unos minutos basta) que puedas estar a solas para pensar en tí, en lo que sientes, en como te sientes. Detecta si es miedo, angustia, tristeza…mira donde está alojada esa emoción (en la garganta, en el estómago, en los músculos) y respira hondo intentando sacarla al expirar el aire. Si repites las respiraciones varias veces, despacio, la sensación es muy relajante.
Son pequeños gestos que te ayudan a tener sensaciones positivas, a respirar hondo, a tomar aire para ti.
Si conseguimos estar conectados a nosotros mismos, sentir nuestras emociones, tener sensaciones agradables, estamos mejor preparados y más dispuestos para contener emocionalmente a nuestros hijos. Ellos también tienen sus propias emociones y hay que detectarlas, escucharlas y acompañarlas.
Ellos detectan las nuestras y, muchas veces, no saben como interpretarlas porque ni siquiera lo sabemos nosotros.
Espero haberos ayudado un poquito con este tema de tomar consciencia de nosotros mismos para sentirnos mejor.
Podéis poner en los comentarios cualquier duda y, si puedo, os ayudo a resolverlas.
Descarga GRATIS la guía:
"Lo que me hubiera gustado saber antes de adoptar"
Lo esencial es estar bien uno mismo. Así podrás estar bien con los demás. Tus consejos estupendos. La falta de tiempo anteriormente no te das cuenta de esos pequeños detalles , pero son necesarios. Yo toco la tierra , cualquier flor , las huelo aspirando y eso es divino. La naturaleza nos da muchas cosas para estar bien. Tanto con los nuestros como cualquier detalle. Un besazo. Sigue así Amparo
Muchas personas, como tú, tienen una sabiduría innata para disfrutar de lo que tienen, para amar a los demás.
Así es, estar bien uno mismo es el primer paso para poder darnos a los demás. Un abrazo.